viernes, 10 de junio de 2011

Destiny

Hace unos días me encontré con el destino y me dio un cuaderno diciendo "haz con él lo que quieras". Era un cuaderno pequeño con un cierre elástico, pero me llamo la atención el detalle de tener mi nombre en la portada.

Me contuve a leerlo mientras volvía a casa, pero mientras pasaba junto a un claro, no pude resistirlo y me tumbé sobre la hierba un instante a echarle un vistazo. Con nervios abrí el cierre, y observé que en cada hoja tenía una fecha y relataba algunas historias, realmente parecía un diario.
El corazón se me paro por un instante cuando llegue a la hoja que marcaba el día presente y comencé a leerla.
Lo que contenía esa libreta era ni más ni menos que las cosas que me habían estado ocurriendo toda mi vida.
Un poco asustado pasé las paginas siguientes. También estaban escritas. Estaba escrito TODO, cada nueva amistad, cada perdida, cada sentimiento, cada discusión... Aún me costaba creer cómo todo eso podía caber en esa pequeña libreta.
Me sentía aprisionado por las irrompibles cadenas del destino, que me llevaban por el camino que habían fijado. Sin poder escapar, sin poder huir.

Aunque...con ese destino "en mis manos" como estaba ahora, podría escribirlo como bien quisiera...

Saqué el lápiz y la goma que por suerte suelo llevar encima, y probé a escribir cualquier tontería para probarlo.

Al cabo de unos minutos, me quedé atónito cuando efectivamente un viajero con gorro verde paso junto a mí, justo lo que escribí.

Tenía el destino en mis manos, literalmente. Fue una sensación de poder absoluto, sentir esas cadenas romperse y no tener nada a lo que temer. Podría evitar cualquier mal, tener a quien quisiera a mi merced,... ¡no tendría por qué morir! solo tendría que escribirlo.

Pero pensándolo fríamente, saqué el mechero y prendí fuego al cuaderno.

Al menos, de esta forma cada día no sigue las pautas impuestas por un puño opresor y, la verdad, no quiero una vida prefijada por mi mismo ni por nadie más, ya que en la vida, como en los juegos, si haces trampas te acabas aburriendo.


Yo saqué mis propias conclusiones, sacad vosotros las vuestras sobre qué hacer si os ofrecieran tener un destino a seguir, o incluso poder manejarlo en cualquier momento.